El cielo tras una nube,
la caricia tras una manta,
crepúsculo en sol naciente...
el horizonte, tras la montaña.

El mundo tras el futuro,
la ciencia sin la esperanza,
el amor tras la exigencia
y el todo después de la nada.

Puede que en mi vida atormente
la tormenta tras la calma,
como se me hacen desiertas
sin besos las almohadas.

Sin besos de un hasta luego
que me acicalen el alma,
sin besos que me acaricien
y den sentido al mañana.

Quizás un beso furtivo,
un beso hacia mi espalda,
me de fragores de nuevo
y me haga dormir en calma.

O quizás un son de ánimo,
o de ánimo una palabra
quitase las nubes al cielo
e insomnio a la noche cerrada...

Pero bueno, un despedirse
tiene saliva amarga
que se queda en el cuello
y aprieta la garganta,

Un apagar de ojos,
un cerrar las miradas
o mirar hacia otro lado,
que por mirar, no ver ni el alba

de otros soles nacientes
que esperan a la alborada
como nos nacen tormentas
tras nubes que nunca pasan...

Es el amor ese cielo
que siempre se me empaña
con adioses permanentes
de amores que se me escapan.

POEMAS PARA UN DESPEDIRSE, EXPLICARSE, AMARSE...
DR. MGF.